¿Tienes el síndrome wanderlust? 6 señales que lo indican
El síndrome wanderlust no es peligroso en sí mismo, y trata sobre la obsesión casi excesiva que padece una persona por viajar a cualquier lugar del mundo.
¿Siempre soñando despierto con tierras lejanas, paneles de información aeroportuaria y maravillándote en una ciudad en la que nunca has estado antes? Se podría resumir en un síndrome llamado «wanderlust», que es una palabra de origen alemán y viene de la unión de ‘wandern’, que significa vagar, y ‘lust’, pasión. Esto es, pasión por viajar. Puede ser demasiado obsesivo y enfermizo, aunque en principio no entraña problemas de ningún tipo: de hecho, viajar es algo muy positivo: conocer nuevos sitios, lugares, gente… te decimos las señales que podrían indicar que padeces el llamado síndrome wanderlust.
1. Te da igual el equipaje. No, no eres de esas personas que repasa la maleta una y otra vez. No necesitas demasiada ropa y accesorios para pasar un viaje increíble, el simple hecho de viajar te apasiona. Todo lo que necesitas es tu equipaje, pasaporte y tu espíritu de aventura, es decir, lo esencial.
2. El tiempo no es un problema. Simplemente quieres viajar, ya sea durante un fin de semana o pasar seis meses fuera de casa. No estás atrapado en un viaje perfecto, de una duración exacta, lo que te mueve es tu pasión por conocer lugares nuevos, deambular y aprovechar cada momento al máximo.
3. Estiras el dinero. No queremos decir que seas una persona ahorrativa, pero si se trata de viajar, cuidas al máximo tus finanzas para poder maximizar el tiempo, la comida, las visitas…de hecho, prefieres gastar el dinero en nuevas experiencias que en comprar souvenirs o cosas materiales que no te van a dar nada que ya no tengas.
4. Curiosidad máxima. Ya sea en casa o en el extranjero, la curiosidad va de la mano con el gen wanderlust. La misma rutina nunca es suficiente para saciar la sed de aventuras. Nuevas comidas, nuevos lugares, nuevos recuerdos y gente nueva a menudo están siempre en el horizonte para tu alma inquieta.
5. No haces planes. Te gusta perderte en el momento presente y siempre estás listo para descubrir algo nuevo y extraordinario. Por supuesto, haces un pequeño trabajo de investigación y preparación sobre el lugar, pero cuando se trata de planificar, no siempre estás de acuerdo. A veces las mejores aventuras son las que llegan por sorpresa.
6. El lenguaje no es una barrera. Las personas que padecen el síndrome wanderlust parecen estar absolutamente fascinados con abrazar el mundo exterior que los rodea. Probablemente, seas el tipo de persona que celebra las diferencias entre culturas y no puedas esperar para intentar sumergirte en un entorno aunque no conozcas el idioma. Esto para ti es un desafío, no una obstrucción.
Fuente: as.com